jueves, 23 de febrero de 2012

Esperanza Gracia-me-haces


Me encanta pensar que una mujer pueda decirme mi futuro a través de la televisión. Los horóscopos son como cualquier creencia, incluso hay personas que llegan a tomárselo muy en serio lo que una “pitonisa” pueda decirte. Es curioso ver alguna noche un programa relacionado a este tema, pues resulta cómico pensar que sus poderes atraviesan tu línea telefónica y, por ejemplo, en cualquier otro momento, tengamos interferencias por tener un móvil cerca. Realmente parece absurdo, pero todos tendemos a mirarlo diciendo que es por mera curiosidad.

Si fuera por mera curiosidad no habría tanta gente que lo sigue y sobretodo, tanta gente que después de ver su horóscopo pueda absurdamente alegrarse de estar en una buena posición en un ranking que han hecho. Desde luego no he comparado en una misma semana diversos horóscopos para saber si coinciden (entendedme, mi tiempo y el de cualquier persona, vale más que eso), aunque estoy seguro que no encajarían casi ni las fechas de los signos (y eso si que está comprobado, hay signos que tambalean entre el 22 y el 23 de algunos meses).

Además, lo gracioso y curioso de todo esto es la satisfacción personal que sienten este tipo de personas cuando “combaten” con lo que le dice su “pitonisa oficial”. Sienten como que están luchando contra su destino y que han sido más fuertes que lo que un hombre o mujer con pintas de intentar asemejarse a “La Hierbas” de “Aquí no hay quien viva” (sin tener nunca su gracia inconfundible) y con un toque más a lo Rappel. Yo lo reconozco, hay momentos dónde que también lo miro y me lo creo. ¡Es que es imposible que se equivoque! Al igual que creo que si tiro una moneda al aire y decido si cae cara o cruz y cae como yo digo, puedo decidir mi futuro (nótese la irónica y el pensamiento absurdo que conlleva). 

No hay comentarios:

Publicar un comentario